Pau Gispert ha hecho una magnifica descripción de las sensaciones que se sienten sobre un blokart, y de como este deporte aporta en nuestras vidas:

«En primer lugar, la enhorabuena por el crecimiento explosivo-exponencial que tiene la Asociación Balear de Blokart. Es una asociación joven, innovadora en Mallorca, Baleares y el territorio nacional. Lejos de anclarse en un modelo conservador, está demostrando una actitud dinámica y creativa, rompedora, pero responsable en todos los sentidos y en especial en la práctica de este deporte por personas con alguna discapacidad.

Se están realizando proyectos para adaptar los blokarts a personas con movilidad reducida, entre los cuales me siento afortunado de formar parte.

Todo empezó en una conferencia de deportes adaptados, estaba mi amigo Miguel «Mix» Manresa hablando sobre deporte adaptado y gentes de diversas asociaciones de minusválidos… en esos momentos no sabía que alguien ya estaba haciendo un sondeo en primera aproximación de quien podría estar interesado ¿sabeis?. Todo depende mucho de la relación soporte físico y sedentarismo, versus inmaginación y pelotas sumado a la voluntad por hacer algo distinto.

Es una pena que mucha gente en silla de ruedas, pierda la motivación y termine buscándola en una copiosa comilona, copa y puro, en la relevancia social y no en la propia caridad bien entendida a través del deporte (sin perjuicio de la buena alimentación y del vicio).

Por suerte, aún no me resigno a terminar hecho una bola de sebo sobre ruedas, y eso lo vió Santi, cuando terminó la conferencia… se acerca y le dice a mi compañera «¿te lo puedo robar?».

La inmensa mayoria de discapacitados que hacen algun deporte, hacen natación como deporte universalmente reconocido y aconsejado en estos casos, pero ¿qué hay de aquel discapacitado que

desee complementarlo o hacer algo distinto, excitante y con alguna dosis de riesgo y que a la vez salga indemne?.

Ciertamente el blokart, tiene la apariencia de deporte de riesgo, y aunque resulta trepidante para cualquiera, para alguien con movilidad reducida signifca mucho más, la sensación de libertad sumada a la que te invade cuando estás cabalgando a lomos del viento, te recarga las pilas con una inyección triple de adrenalina que con otros deportes seria difícil, por no decir imposible… además de insensato, pues probablemente rebasaria las posibilidades y los límites de seguridad para el discapacitado que lo intentara.

Pues queridos amigos, en un blokart NO hay límites, y lo digo con conocimiento de causa, es el «deporte de riesgo», que hoy por hoy más posibilidades de adaptación pueda tener.

Pongamos en los platillos de la balanza «Adrenalina vs. Riesgo». Está claro que cuanto más riesgo, más adrenalina se libera, pero en blokart tú elijes, independientemente del viento que haya, tú decides a que velocidad quieres ir y hasta donde quieres llegar.

Las comparaciones son odiosas y os las dejo a vosotros, pero pensad, en un blokart no vuelas, ruedas a unos escasos centímetros del suelo !la sensación de velocidad es muy grande! Las aceleraciones son brutales, pues es el viento es quien te empuja a ti, a veces predecible , a veces caótico. Notas como la energía del viento se transmite como el rayo desde la vela directo a tu espina dorsal, y por un momento sientes lo mismo que cuando despegas en un avión, además no hay ruidos ni olores de motor, sólo el viento golpeando en tú vela, y con ese sonido sientes como si llevaras un V8 pegado al culo.. paz y guerra a la vez. En los giros, las fuerzas centrípetas revuelven tus órganos vitales… sientes como vibra el conjunto… tú gobiernas por un rato el poder del viento, y eso te hace sentirte grande, dialogas con Eolo y hay días en los que está hablador o te escucha o está enfadado y en otros él mismo te dice, volad junto a mí hijos mios…

Sobre un blokart puedes hacer regatas con otras personas y en su práctica ejercitas, no sólo tu cuerpo, si no tu mente, pues mejoras tú coordinación motora, tus aptitudes tácticas y estratégicas. !Todo esto sin tomar el vuelo, ni perderte en el océano, ni tirándote por una pared de nieve!.

Un conjunto de nuevos factores que cuando se mezclan dan como resultado una actividad potencialmente realizable por cualquiera, lleves o no pegada a tu culo una silla de ruedas.

Si eres discapacitado, anímate a probarlo, no te dejará indiferente.»

Pau Gispert, 27 de Enero del 2008